Ayer hablabamos de Amy Winehouse, que con tan solo 27 se apagó para siempre. Hoy recordamos al que fuera considerado el portavoz de la Generación X, que también pertenece a ese fatídico club de los 27. Nacido en Washington en febrero de 1967, Kurt Cobain destacó a muy temprana edad en la música. Guitarrista, baterista y compositor, conoció a mediados de los ochenta a Krist Novoselic, con quien, años más tarde formaría uno de los grupos de grunge más importantes de la historia: Nirvana.

Influenciados por el rock clásico de Black Sabbath y Led Zepelin, el grupo publicó su primer álbum bajo el sello independiente Sub Pop. Pero el éxito les llegaría dos años después, cuando lanzaron Nevermind bajo la producción de Butch Vig. El álbum, que desplazó a Michael Jackson de los primeros puestos de las listas musicales de principios de los 90, alcanzó rápidamente unas cotas de éxito inesperadas, convirtiéndose, no solo en un referente de la cultura grunge, sino también en un icono del rock alternativo. El estilo de este joven espíritu llamado Cobain, impregnó a todo tipo de público. Nevermind ha sido diez veces disco de platino y es considerado uno de los mejores discos de la historia, con más de treinta millones de copias vendidas desde su lanzamiento en septiembre de 1991.

De entre los trece temas incluidos en el álbum, destacamos el que se convirtió en un himno para toda una generación. Versionado en numerosas ocasiones, Smell like Teen Spirit, no solo consiguió colocarse en el número uno de todas las listas de éxitos, sino que además se convirtió en un referente de rock alternativo de todos los tiempos. Pese al enorme impacto mediático que supuso la música de esta formación en el panorama internacional, Nirvana tocó a su fin cuando en 1994, Kurt Cobain fue encontrado muerto en su casa de Seattle.